Este mes hemos tenido la oportunidad de entrevistar a Jorge Barriobero, director de proyectos de I+D y responsable del área de Envases y Conservación de CTIC-CITA.
Háblanos de CTIC-CITA. ¿Cuál es su know-how y qué servicios presta?
El Centro Tecnológico de la Alimentación CTIC-CITA apoya a la industria agroalimentaria con sus cinco áreas estratégicas: Ingredientes y Salud, Procesos, Calidad y Seguridad Alimentaria, Sensorial y Consumo, Nuevos Productos y Envasado y Conservación de Alimentos. De este modo, el CTIC-CITA contribuye a mejorar la competitividad y eficiencia de las empresas del sector a lo largo de toda la cadena de valor.
El área de Envasado y Conservación de Alimentos es la más vinculada con MANDALA, ya que está especializada en aumentar la vida útil de los alimentos y mejorar la calidad de los productos envasados. Por ello, apoyamos a las empresas para que se adapten a las nuevas exigencias, marcadas por las estrategias europeas, en materia de envases sostenibles.
Has mencionado cómo CTIC-CITA ayuda a conseguir los objetivos marcados por Europa en materia de sostenibilidad. ¿Podría contarnos más sobre su relación con MANDALA?
MANDALA está relacionada con varias de las estrategias publicadas por la Comisión Europea. Empezando por el último «Plan de Acción para la Economía Circular» publicado en 2020, este documento incluye medidas a lo largo del ciclo de vida de los productos, empezando por su diseño hasta el final de su vida útil. Su objetivo es fomentar el consumo responsable y conservar los recursos a través de una economía circular.
Además, en 2018, la Comisión Europea publicó la «Estrategia Europea del Plástico». Uno de sus objetivos es conseguir que para 2030 el 100% de los envases de plástico comercializados en el mercado europeo sean reutilizables o reciclables de forma rentable. Esto supone un reto porque los materiales con altas propiedades de barrera no pueden reciclarse de forma rentable, y los materiales fácilmente reciclables no alcanzan las propiedades requeridas por la industria alimentaria y los consumidores.
De aquí surgen los tres pilares principales en los que se basa el proyecto MANDALA: ecodiseño, doble funcionalidad y fin de vida.
Como expertos en el sector agroalimentario, ustedes conocen el estado del arte de los envases. ¿Qué puede decirnos de sus resultados en el proyecto?
Una de las tareas que hemos llevado a cabo ha sido establecer cuál era nuestro punto de partida. En primer lugar, seleccionamos diferentes matrices alimentarias, eligiendo como más representativas: carne curada, carne fresca, productos listos para comer y productos listos para cocinar.
A continuación, analizamos las propiedades de los materiales de envasado tradicionalmente utilizados por la industria alimentaria en estos productos. Entre las características de los materiales, estudiamos su composición, transparencia, espesor, resistencia a la temperatura y permeabilidad a los gases.
Las pruebas posteriores de estos materiales nos permitieron obtener la referencia sobre su comportamiento con los alimentos. Comparando los datos obtenidos, vimos que todos los productos tienen diferentes atmósferas modificadas, pero tienen algo en común: todos ellos requerían buenas propiedades de barrera para mantener las estrictas condiciones dentro del envase.
¿Qué puedes decirnos sobre los requisitos de los consumidores y la industria?
Garantizar la seguridad del producto y mejorar su sostenibilidad es necesario, pero no es suficiente. Hay que saber qué demandan los consumidores. Por ello, hemos realizado un estudio sobre los consumidores.
Utilizando la plataforma MUNDOSABOR, hemos lanzado una encuesta a una comunidad de hogares piloto utilizando una metodología ad hoc. Destacando algunos puntos, hemos obtenido información sobre cuáles son las preocupaciones del consumidor en materia de sostenibilidad, la actitud hacia el reciclaje, el conocimiento del ecodiseño y los formatos de envases que más utilizan.
Por otro lado, hemos evaluado cuál es su opinión sobre las estrategias de sostenibilidad que aborda el proyecto MANDALA. En términos generales, el interés mostrado ha sido positivo. El aspecto más valorado ha sido la reducción de conservantes gracias al uso de atmósferas modificadas. Los consumidores también han mostrado un gran interés por la desvinculación de la producción de plástico de los recursos naturales basados en combustibles fósiles y la consiguiente reducción de la huella de carbono.
A pesar de este interés, hay que establecer cuánto más están dispuestos a pagar los consumidores por este nuevo producto. Según la encuesta, el 47% de ellos estaría dispuesto a pagar más, frente al 9% que no lo haría. Esto deja al 44% de los consumidores encuestados que lo harían en función del precio.
Por último, hemos elaborado una lista de control con los objetivos que debemos alcanzar en los productos desarrollados. En consecuencia, se incluyó información relacionada con los ingredientes, el procesamiento, las propiedades de los materiales, las condiciones de la atmósfera modificada y los problemas típicos durante la vida útil de los alimentos envasados (problemas microbiológicos, oxidación del producto o variación del color).
MANDALA está llegando a sus últimos meses. Aparte de los resultados obtenidos dentro del proyecto, ¿qué ha obtenido de la participación en un consorcio multidisciplinar y paneuropeo?
Ctic Cita participa en proyectos de investigación que amplían constantemente la frontera del conocimiento. Durante el proyecto MANDALA, hemos adquirido valiosos conocimientos que utilizaremos en futuras investigaciones y desarrollos. En consecuencia, nos mantenemos a la vanguardia de los temas clave para la industria, lo que nos permite apoyar a las empresas agroalimentarias y mejorar su competitividad.
